A menudo me gusta ir al cine una vez pasada la típica vorágine de estreno del "blockbuster" mayoritario, tras un par de semanas en las que los éxitos ya no son tantos, y los fracasos tienen más aspectos salvables. Y precisamente me ha ocurrido lo mismo con "Batman Begins", que ya empiezo a ver algo más de cordura por parte de crítica y público, tras la elevación al Olimpo que sufrió la obra de Nolan durante su estreno. Vista ahora, y aunque me parece una sólida película de superhéroes, realmente no creo que sea para tanto.
Enfrentada a la visión que Tim Burton dió sobre el hombre-murciélago, "Batman Begins" actúa como un espejo, una especie de cristal deformante donde el héroe ve aumentado su tamaño y los villanos aparecen más pequeños. De todos es conocida la preferencia de Burton por lo "freak", un hecho que pone de manifiesto en la construcción de los villanos en sus dos películas. Tanto el Joker, el Pingüino, o Catwoman consiguen que el espectador empatice más hacia ellos que hacia el propio protagonista de la función. El Batman de Burton no deja de ser otro "freak", un tipo que se viste de murciélago para pasear por la ciudad y que no está muy lejos del propio criminal al que da caza. Sin embargo, el lei-motiv de su transformación se presenta desdibujado, y su búsqueda de venganza no va más allá de la muerte de sus progenitores. De hecho, si ponemos en marcha nuestra memoria, los films de Burton son más recordados por su parafernalia gótica que por su propio guión (1).
De alguna manera, "Batman Begins" es un film sobre Batman y protagonizado por la dualidad Bruce Wayne/Batman. De ahí que Nolan se tome su tiempo en un larguísimo, que no aburrido, prólogo antes de entrar en la acción pura y dura. Por otro lado los villanos de "Batman Begins" no son mostrados con la fuerza de los de Burton, y actúan más como comparsas del propio héroe, careciendo en algunos casos de personalidad propia, como es el caso del Espantapájaros, cuyas motivaciones parecen inexistentes. Pero si en algo estamos de acuerdo es que la película se llama "Batman Begins", y son los inicios y la formación de la compleja personalidad de su protagonista lo que realmente le interesa a Nolan.
Enfrentada a la visión que Tim Burton dió sobre el hombre-murciélago, "Batman Begins" actúa como un espejo, una especie de cristal deformante donde el héroe ve aumentado su tamaño y los villanos aparecen más pequeños. De todos es conocida la preferencia de Burton por lo "freak", un hecho que pone de manifiesto en la construcción de los villanos en sus dos películas. Tanto el Joker, el Pingüino, o Catwoman consiguen que el espectador empatice más hacia ellos que hacia el propio protagonista de la función. El Batman de Burton no deja de ser otro "freak", un tipo que se viste de murciélago para pasear por la ciudad y que no está muy lejos del propio criminal al que da caza. Sin embargo, el lei-motiv de su transformación se presenta desdibujado, y su búsqueda de venganza no va más allá de la muerte de sus progenitores. De hecho, si ponemos en marcha nuestra memoria, los films de Burton son más recordados por su parafernalia gótica que por su propio guión (1).
De alguna manera, "Batman Begins" es un film sobre Batman y protagonizado por la dualidad Bruce Wayne/Batman. De ahí que Nolan se tome su tiempo en un larguísimo, que no aburrido, prólogo antes de entrar en la acción pura y dura. Por otro lado los villanos de "Batman Begins" no son mostrados con la fuerza de los de Burton, y actúan más como comparsas del propio héroe, careciendo en algunos casos de personalidad propia, como es el caso del Espantapájaros, cuyas motivaciones parecen inexistentes. Pero si en algo estamos de acuerdo es que la película se llama "Batman Begins", y son los inicios y la formación de la compleja personalidad de su protagonista lo que realmente le interesa a Nolan.
Batman siempre ha sido uno de los superhéroes más apreciados por el público, por dos razones: la primera porque es humano y carece de poderes, y la segunda por su carácter, que adquiere tintes esquizoides. En este sentido, el Batman creado por Nolan es el más humano y el más realista de todos, un Bruce Wayne con debilidades físicas (como lo demuestra la genial escena en la que se levanta de la cama lleno de contusiones en el cuerpo), pero sobre todo con una tremenda fragilidad emocional, la cual intenta olvidar a través de la transformación en su alter-ego. Wayne esconde un pasado tortuoso que reprime al enfundarse su traje negro, mediante el cual infunde ese MIEDO, motor de sus pesadillas y a la vez gasolina para su venganza ante la megalopolis infestada de criminales que es Gotham. Nolan consigue infundirnos ese miedo que propaga el hombre-murciélago a sus oponentes a través de dos aspectos: el primero, el propio traje del superhéroe, totalmente oscuro, que se confunde con las sombras que tanto tememos; y en segundo lugar, gracias a una dirección ágil y temblorosa que impide ver los movimientos del héroe, y que sitúa al espectador en el mismo lugar que en el de los criminales. Además, nada mejor que escenificar una psique tan escindida como a través del rostro ambigüo de un actor como Christian Bale, incluyendo ese cambio en el tono de su voz cuando es Batman.
La primera hora de "Batman Begins" es de largo, la más interesante, y ello a pesar de un guión que me atrevo a discutir ante la opinión general. Las conversaciones que mantiene Wayne con Ducard caen en el pseudo-misticismo más inane, con un halo de trascendencia barata que casi da vergüenza. Y es que Goyer y Nolan no son Bergman, así que se pide algo más de practicidad y elocuencia, y menos diálogos aparatosos. Por ello, la fuerza de la transformación de Bruce Wayne en Batman surge más como fruto de las imágenes que Nolan consigue, que a través de los propios diálogos. Así, hay tres secuencias básicas que dan empaque a la formación del superhéroe:
1)El momento en que Wayne-niño cae al pozo, donde se pone de manifiesto su miedo a los murciélagos, y es el padre quien finalmente lo rescata.
2)Cuando Wayne-adulto regresa a la misma cueva, y aunque al principio se asusta ante el grupo de murciélagos, finalmente va asumiendo su condición.
3)La secuencia en que Batman abandona el asilo de Arkham, rodeado de estos animales, y donde ya su verdadero yo ha asumido la personalidad del murciélago, quedando Bruce Wayne como una mera máscara ante la sociedad (2)
La primera hora de "Batman Begins" es de largo, la más interesante, y ello a pesar de un guión que me atrevo a discutir ante la opinión general. Las conversaciones que mantiene Wayne con Ducard caen en el pseudo-misticismo más inane, con un halo de trascendencia barata que casi da vergüenza. Y es que Goyer y Nolan no son Bergman, así que se pide algo más de practicidad y elocuencia, y menos diálogos aparatosos. Por ello, la fuerza de la transformación de Bruce Wayne en Batman surge más como fruto de las imágenes que Nolan consigue, que a través de los propios diálogos. Así, hay tres secuencias básicas que dan empaque a la formación del superhéroe:
1)El momento en que Wayne-niño cae al pozo, donde se pone de manifiesto su miedo a los murciélagos, y es el padre quien finalmente lo rescata.
2)Cuando Wayne-adulto regresa a la misma cueva, y aunque al principio se asusta ante el grupo de murciélagos, finalmente va asumiendo su condición.
3)La secuencia en que Batman abandona el asilo de Arkham, rodeado de estos animales, y donde ya su verdadero yo ha asumido la personalidad del murciélago, quedando Bruce Wayne como una mera máscara ante la sociedad (2)
Como resumen, ¿por qué con todos los puntos a favor que he comentado antes, "Batman Begins" no puede convertirse en una obra maestra? Sencillamente por la sensación de "deja vu" de la película. Su segunda mitad, sin desdeñar detalles tanto visuales como argumentales (muy bueno, por cierto, el mcguffin que utilizan los villanos para acabar con Gotham, así como los efectos que provoca), se presenta como algo que hemos visto hasta la saciedad, y que puede ser más fruto del bombardeo constante del cine de superhéroes que del propio film en sí mismo. Si bien Nolan maneja bastante bien la narración a lo largo de los casi 150 minutos de metraje, no evita que las escenas en las que Wayne se prepara (buscando las armas, preparando el traje) aburran, ya que es algo que estamos hartos de ver. Asimismo, las secuencias de acción están alargadas, como por ejemplo, la persecución al Bat-movil, pero claro, había que meterla para enseñarnos un poco más el nuevo prototipo de máquina. Toda esa sensación de "eso ya lo hemos visto" juega en contra de la película y rompe con el tempo sosegado de los primeros compases.
Nolan ha hecho un buen trabajo, no lo niego, consiguiendo un largometraje adulto y serio, pero cuyas concesiones al propio género que trata disminuyen el interés. Al fin y al cabo, "Batman Begins" no deja de ser pasto de multicines y de espectadores que buscan la rápida evasión, y por lo tanto, no puede dejar de lado la acción y la espectacularidad.(3)
(1) Con esto no infravaloro a las películas de Burton, cuya imaginería visual me encanta.
(2) Frase, por cierto, que Rachel le dice casi al final del film.
(3) Aspecto que afectó al "Hulk" de Ang Lee, que se movía en arenas movedizas: demasiado profundo para el consumo rápido veraniego, pero con muchas concesiones al espectáculo para quien buscara algo más.
Nolan ha hecho un buen trabajo, no lo niego, consiguiendo un largometraje adulto y serio, pero cuyas concesiones al propio género que trata disminuyen el interés. Al fin y al cabo, "Batman Begins" no deja de ser pasto de multicines y de espectadores que buscan la rápida evasión, y por lo tanto, no puede dejar de lado la acción y la espectacularidad.(3)
(1) Con esto no infravaloro a las películas de Burton, cuya imaginería visual me encanta.
(2) Frase, por cierto, que Rachel le dice casi al final del film.
(3) Aspecto que afectó al "Hulk" de Ang Lee, que se movía en arenas movedizas: demasiado profundo para el consumo rápido veraniego, pero con muchas concesiones al espectáculo para quien buscara algo más.
Un saludo
5 comentarios:
Coincido con tu conclusion de que Batman begins, a pesar de ser una superproduccion muy digna no acaba de pasar el filtro para convertirse en una obra redonda, hasta que no te he leido , no me daba cuenta de donde venian mis reticencias a la pelicula de nolan, y es que por muy buena que sea la factura y los materiales, en realidad no aporta nada nuevo al genero, a diferencia de lo que hizo con la franquicia Tim Burton.
para mi Batman returns es la mejor de la saga con mucha diferencia, pero concediendole el merito que tiene a Nolan no sabria cual situar en 2º lugar entre mis preferencias
A mi me pasó lo mismo Inquisidor. Yo estaba viendo la peli y decía: buen ritmo, personajes interesantes, historia bien construida, pero, ¿por que coño no me emociona?, ¿por qué me parece q todo ya lo he visto?
Pero tengo una corazonada, y creo q al igual q Burton, la segunda parte va a ser mucho mejor que la primera, una vez eliminada la carga de recrear las ya manidas secuencias de iniciación del héroe.
Saludos
pregunta de novato?? eso de las polls como se hace??
respondiendo a inquisidor...a través de bravenet este, te registras y entre todas las polladas que te ofrecen, está la encuesta. Copias los datos y los metes en la plantilla del bloq..
Un saludo...para mi info, mandame un mail
Para el 9º tio:
sip, Nolan, Bale y Caine tienen contrato para dos películas mas.
Saludos
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